Silvio. Una breve biografía

Vida, obra y milagros

En La Roda (Sevilla) vino al mundo un 08 de Agosto de 1944 Silvio Fernández Melgarejo más conocido por Silvio.

Su padre, Antonio de los Santos, redactor jefe del ABC de Sevilla. Su madre Eva, de raza gitana, natural de Los Palacios. Diez años más tarde, nació su única hermana, Evita, que se suicidaría siendo Silvio adulto.

Hombre con suerte, a pesar de todo, contrajo matrimonio con una rica heredera aristócrata británica en la iglesia del Cachorro de Triana. El matrimonio trasladó su residencia a Marbella, aunque —evidentemente— no duraría mucho. Tuvieron un hijo, SAM, el cual también canta y toca la batería.

Según parece, debido a una antigua ley franquista que no permitía a la esposa sacar dinero del banco, el que la familia de ella le ingresaba mensualmente debía, pues, ser retirado del banco por Silvio… Pues bien, cuentan que una de las veces que fue a sacar la mensualidad del banco, se hizo acompañar de uno de sus ‘amiguetes’, yendo directamente al Aeropuerto de Málaga y, de allí, salió en el primer avión listo para despegar con destino a cualquier país europeo. Sin llegar a salir de los aeropuertos continuó su peculiar periplo por toda Europa cogiendo uno detrás de otro el primer avión que iba saliendo, y por supuesto sin parar de beber y de fumar durante el trayecto, así hasta que el dinero se acabó.

De Silvio, leyenda urbana donde las haya, existen partes de su biografía que no se conocen a ciencia cierta. Todos estos aspectos biográficos fueron investigados, confirmados y, muchos de ellos descubiertos, tales como el paradero de su hijo y su relación con la aristócrata inglesa, en el documental que, sobre la vida de Silvio, rodara en 2007 Francisco Bech: ‘A la Diestra del Cielo’. Éste es el trabajo más completo sobre su figura: grabaciones inéditas, material de archivo y numerosas entrevistas que incluyen a su madre Eva, su hijo Sam, Ricardo Pachón, todos sus músicos, Luz Casal, Alberto García-Alix y ‘El Sevilla’ de Mojinos Escozíos, entre muchos otros.

Previo a este documental se edito el libro ‘Vengo Buscando Pelea’ de Alfredo Valenzuela en 1991, con apuntes biográficos y numeroso anecdotario sobre el artista.

Genuino y auténtico, su voz peculiar, así como ese físico ojeroso y arrugado, aportarían al Rock’&’Roll nacional ese cierto tipo de ‘arte’ del que sólo alguien como él puede ser dueño y señor. Sobre un escenario era el rey en todo momento, siendo respetado por un público que guardaba silencio, expectante por ver a ese hombre tambalearse de un lado al otro, continuar cantando con el micrófono desenchufado…, e incluso negarse a cantar después de estar todo preparado, dejando que el trabajo lo hiciera el resto del grupo mientras él deambulaba entre los músicos al ritmo de la melodía. A pesar de eso y de que en la mayoría de las ocasiones necesitaba un ‘empujoncito’ para poder terminar alguno de sus temas, la gente lo adoraba.

En sus comienzos colaboró estrechamente con los pioneros del Rock Andaluz en Sevilla: Smash. De hecho en una entrevista que le realizó Ángel Casas en los 80’, llegó a afirmar que la idea del ‘Rock Flamenco’, como él lo llamaba, era suya. Dejó momentáneamente la música cuando se casó, permitiendo así que, sus colegas de Smash y, posteriormente, Triana, Alameda…, 'continuaran desarrollando la idea'.
Sólo grabó en su carrera musical cinco discos. En ellos se entremezclaban versiones de clásicos de los 50’ y los 60’, combinando el Rock’&’Roll más típicamente americano con temas de corte italiano —épica la versión que llevó a cabo del ‘Pregherò’ de Adriano Celentano, ya versionado en su día por John Lennon y compuesto por Ben E. King— junto a conocidos temas de Antonio Molina…, por supuesto que interpretándolos en cualquier idioma que se le venía a la cabeza, ya fuera inglés, francés, portugués o italiano —reinventando el idioma, por supuesto—, improvisando siempre que algo le era desconocido. Eso hacía que sus conciertos tuvieran ese distintivo inimitable, algo que también ha contribuido a que pasara a formar parte de la historia de la música española: toque personalizado, improvisaciones van y vienen y un idioma único… Por cierto, el tema al que hago referencia es ‘Rezaré’, dedicado, ¡cómo no!, a todas las imágenes marianas de la Semana Santa de Sevilla. Dedicó temas a vírgenes sevillanas, al Rey San Fernando, al Real Betis Balompié... A pesar de que pueda parecer lo contrario, Silvio fue educado por encima de todo. Forofo del Sevilla Fútbol Club más que de ninguna otra cosa, tenía amigos de los dos clubes de fútbol de la ciudad. El tema compuesto al Betis decía en su estribillo ‘no busque más que no hay’ y lleva por título ‘Betis’.

Llegó a actuar en directo junto con músicos como Joaquín Sabina, Ketama y Loquillo y los Trogloditas, en la inauguración de Cartuja 93', actualmente conocida como Isla Mágica.

¿Lo que más le gustaba, aparte de cantar rock? El fútbol, un gin-tonic y un cigarrillo, que siempre llevaba entre los labios.

Sus últimos años los pasó en soledad y casi olvidado del mundo, en Madrid le dedicaron un homenaje en ‘La Boca del Lobo’ bajo el título ‘Solemne Quinario de Besamanos a Silvio’.

El 1 de octubre de 2001, en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, y, casi un mito en vida, murió a causa del abuso de lo que el consideraba ‘buena vida’: conocer bien las altas horas de la madrugada, horas muertas delirando por el alcohol y nubes de tabaco que siempre le seguían. Su cuerpo terminó dejando libre su alma tras una parada cardiorrespiratoria.

Muchos conocidos fueron a despedirle el día de su entierro: Pive Amador, Kiko Veneno, Luz Casal, Raimundo Amador, Gualberto, Jesús Quintero…, cada uno con una historia que contar sobre el cantante.

Curiosidades

Uno de sus comentarios más famosos era que cuando se sentía deprimido se acercaba al estadio Ramón Sánchez Pizjuán, frente al mosaico del escudo del Sevilla F.C., y allí meditaba y meditaba mientras el taxista debía alumbrar el escudo con sus faros por petición suya.

Sus músicos decían de él que ‘si hubiera querido nos podía haber hecho ricos a todos, pero Silvio, era Silvio’.

En otra entrevista que le realizaron, le preguntó un periodista ‘¿Qué hiciste el día de la muerte de Elvis Presley?’ a lo que respondió: ‘Me puse mi chupa de cuero y me tomé una botella de anís; como murió en agosto, no veas qué calor con la chupa’.

En una ocasión se le preguntó ‘¿Qué es lo más grande que has hecho por amor?’ Su respuesta fue ‘Por amor fui capaz de tomarme un tinto, en vez de un gin-tonic’.

Pendiente de entrevistar y, sentado al borde una mesa vacía dijo extrañado ‘¡Qué triste una mesa vacía! ¿Aquí no dan ná’ de bebé?’. La presentadora pidió a una azafata que le llevase algo y, ésta, apareció con un vaso de agua. Silvio miró el vaso, después a la azafata y dijo: ‘¡Ojú, mi arma! ¿Agua me va’ a traé?’ Esto se lo echa a las ranas. A mí me trae un vaso de whisky con hielo, guapa’. Eso sólo lo podía hacer Silvio.

Discografía

Silvio y Luzbel, (1980) ‘Al Este del Edén’.

Silvio y Barra Libre, (1984) ‘Barra Libre’.

Silvio y Sacramento, (1988) ‘Fantasía Occidental’.

Silvio y Sacramento, (1990) ‘En Misa y Repicando’.

Silvio y los Diplomáticos, (1999) ‘A Color ‘To África From Manchester’’.

Silvio y Sacramento, (2005) - 'Edición Especial (Fantasía Occidental + En Misa y Replicando)'.

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En definitiva este Capitán espera que os haya gustado, y se despide de él a modo de epitafio con una frase que bien podría figurar en su lápida:

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No tenía ningún problema en pasar del estado de 'coma' al estado de 'beba'.